Poema

LA EXPERIENCIA

Cuando se hacen tan cortos
los días y las semanas,
cuando ya mi juventud
se quedó atrás tan lejana,
pienso si valió la pena
luchar tanto para nada.
Si mañana aquí se queda
¡todo! No te llevas nada.

Por eso como ya sé
lo que pasará mañana,
me voy tomando la vida
más relajado, con calma.

Los años te aportan luz
para ver las cosas claras
y caminar por la vida
recreando la mirada,
para vivir el presente
y no el ayer ni el mañana.

¡Qué pena que la experiencia
cuando llegas a alcanzarla,
ya es tarde y sólo podrás
un instante disfrutarla!

Aprende de aquel refrán
que habla de «agua pasada…»
y del otro que nos dice
«no dejes para mañana…»
yo digo: “vive el presente”,
¡pero vívelo con gana!

Una noche que la Luna
pasó junto a mi ventana,
quise conversar con ella,
pero ella no se paraba.

Yo la tengo por amiga
y como vi que pasaba
corriendo porque su amor
a media luz la dejaba,
le dije yo muy seguro
pero con pocas palabras:
«¡ Deja de correr, chiquilla,
deja que tu amor se vaya!
¡ Ven a contemplar conmigo
la bella noche estrellada!»

Yo también iba corriendo,
sentía voces, no escuchaba.
Pero un día ya cansado,
una bonita mañana,
se clavaron en mi pecho
unas palabritas sabias.

«¡La estrella que vas buscando
nunca podrás alcanzarla!

Por eso yo, amiga mía,
entiendo lo que te pasa
y quiero darte el consejo
que escuché aquella mañana
de los labios de aquel viejo.

Ese que ahora camina
con los dos pies en el suelo,
sabe que no alcanzarás
a tu Sol, ¡el rey del cielo!»

  Pedro Toledano Guerrero